El salón principal refleja el esplendor que rodeaba la vida de los reyes bávaros. 2 Hohenschwangau. Neuschwanstein, Herrenchiemsee, Linderhof. Neuschwanstein, Herrenchiemsee, Linderhof. Aquella música lo cautivó. Nymphenburg. Meneame Los cuatro castillos de Luis II de Baviera se encuentran en la ruta alemana de los Alpes. Continuaremos nuestra Ruta de los palacios del rey Luis II de Baviera en el valle de Graswang, en las cercanías de los pueblos de Oberammergau y Ettal. Es una mezcla de estilo Tudor, gótico y medieval. La pandemia de coronavirus nos aguó la fiesta, pero ahora les traemos las vivencias de Lukas Stege en febrero. Luis II nació en 1848. Contundentes fortalezas defensivas o fantasías fruto de sueños imposibles. Luis II de Baviera y los castillos en los que residió son un magnífico hilo argumental para recorrer el sur de este estado alemán. Luis II de Baviera conocido como “el Rey Loco” fue el artífice o precursor de algunos de los castillos más impresionantes de Alemania y de todo el mundo. En realidad, la idea era erigir en la soledad de los Alpes de Ammergau una réplica de Versalles. Este último aloja hoy el Museo de Historia de la ciudad, que describe el apogeo de Füssen como centro de fabricación de violines en el siglo XVI. Esta isla del Chiemsee aloja un magnífico castillo. Baviera fue el último land que se incorporó al II Reich, y hasta la muerte de Luis II en 1886 gozó de una amplia autonomía. 5 Linderhof. Luis II nació en el palacio de Nymphenburg, en las afueras de la capital bávara. En 1869 se iniciaron las obras sobre bosquejos del pintor Christian Jank, bajo la mirada de Luis II, que las observaba con un catalejo desde las antiguas habitaciones de su madre, en el castillo Hohenschwangau. Fuera de la ciudad vieja, un sendero conduce hasta el puente de Maxsteg, situado sobre la cascada que el río Lech forma tras bordear la ciudad y antes de remansarse en el lago Forggensee, un enclave ideal para hacer excursiones a pie y en bicicleta. Luis nació en 1845 en una de las regiones que por aquel entonces comprendía uno de los mayores reinos del Imperio Alemán, el reino de Baviera.Aquel niño pertenecía a la familia de los Wittelsbach, hijo de Maximiliano II de Baviera y la princesa María de Prusia, personalidades ilustradas que vivían en un reino próspero en arte y cultura. Su recinto más espacioso es el dormitorio del rey, quien a menudo concedía audiencias desde la cama. Su visita es un complemento al castillo de la isla Herrenchiemsee. 1 Múnich. La ciudad bávara de Múnich fue fundada en 1158 por el duque Enrique el León al lado del puente construido sobre el rio Isar para el trasporte del importante comercio medieval de la sal. Newsvine, Enlace permanente https://p.dw.com/p/2RD3z. Los cuatro castillos de Luis II de Baviera se encuentran en la ruta alemana de los Alpes. En vano buscará el visitante un centímetro de tabique o de techo sin la decoración recargada propia del rococó. Sonico Además de Neuschwanstein, completan el trío de los llamados «Castillos del Rey Loco» el Palacio de Linderhof y el Palacio de Herrenchiemsee, a los que yo añadiría el Castillo de Hohenschwangau, cuna de su locura. Aviso legal | El «mar de Baviera» es un famoso destino de verano. Esta fantasía arquitectónica nació el día en que el adolescente príncipe Luis asistió en Múnich a una representación de la ópera Lohengrin de Wagner. En este último, se encuentra el único museo existente de Luis II donde se exhiben piezas y objetos relacionados con su vida y obra. Sus salas están decoradas con escenas mitológicas. Las plazas de medio viejo continente se llenan de calidez con sus puestos de adornos y luces durante las últimas semanas del año. Hohenschwangau es el castillo donde el "rey loco" pasó su infancia. 13:21, REINHARD SCHMID / HUBER / FOTOTECA 9 X 12. En realidad, durante sus visitas a la isla se alojaba en el convento Chorherrenstift de los agustinos, hoy habilitado como un confortable hotel que ofrece visitar los aposentos privados del rey. Documentación: DNI o pasaporte. El duque Enrique el León se enfrentó al poder de Federico Barbarroja, siendo derrotado y desposeído de la recién fundada ciudad. ¿Deseas dejar de recibir las noticias más destacadas de Viajes National Geographic. Enviar Las salas del Hohenschwangau están decoradas con pinturas alusivas a las leyendas germánicas que poblaron las composiciones de Richard Wagner. En la colina situada justo delante del palacio de Hohenschwangau despuntan los torreones del Neuschwanstein, un castillo que las películas de animación de Walt Disney. De vuelta a Múnich resulta más que recomendable desviarse hasta el lago Chiemsee. Melancólico y soñador, Luis II (1845 a 1886) vivió para la poesía, el arte y la música, especialmente la de Richard Wagner, a quien protegió y cuyas obras le inspiraron para crear sus particulares paraísos. Se dice que el rey nació el 25 de agosto de 1845, precisamente el día en que había nacido su abuelo, Luis I de Baviera, y el mismo día en que se conmemora la muerte de San Luis de Francia, su antepasado. Luis II no vio finalizadas las obras del palacio que se erige en esta isla del lago Chiemsee. Apenas diez minutos en coche separan Füssen del castillo de Hohenschwangau, aupado sobre una colina boscosa frente al lago Alpsee. Durante un viaje al Tirol, el todavía príncipe heredero Maximiliano II de Baviera (1811-1864) se prendó del lugar y decidió reedificar un ruinoso castillo medieval que pertenecía a su familia. Alrededor del palacio surgió el elegante distrito de Neuhausen, cuajado de mansiones de la aristocracia bávara. El palacio de juventud se sitúa sobre el lago Alpsee. Herrenchiemsee. Conocido popularmente como «el mar de Baviera» por su extensión (82 km2), alberga dos islas de interés histórico: Fraueninsel, que tiene una abadía del siglo VIII de cúpula bulbosa y un museo de arte medieval; y Herrenchiemsee, donde se erige otro de los palacios de Luis II. Turismo de Baviera, Un paseo entre palacios barrocos, cervecerías y museos de vanguardia, Un recorrido desde Múnich a través de los Alpes alemanes en busca de los castillos de Luis II. Idioma: alemán. La fascinación por el rey bávaro sigue atrayendo también hoy a miles de visitantes. Sin desmerecer Herrenchiemsee, lo cierto es que le guardo un cariño especial al pequeño Linderhof. Su abuelo, Luis I, ocupaba el trono bávaro desde 1825. Los puntiagudos torreones de este castillo de cuento recortan su silueta sobre los picos nevados y el verde intenso de los bosques alpinos. | Versión para móvil. Cómo moverse: Además del coche de alquiler, Baviera dispone de una buena red de autobuses y trenes regionales. Cómo llegar: El aeropuerto de Múnich tiene conexiones frecuentes con Madrid, Barcelona y Bilbao. Diseñado como un Versalles en miniatura, este palacio era el refugio de Luis II cuando quería huir de la corte. En el tramo final del viaje por Baviera, en medio de un paisaje tan evocador como el Chiemsee y después de haber disfrutado con las fantasías de Luis II, habría que plantearse qué pensarían quienes lo acusaban de despilfarrador si supieran que aquellos palacios constituyen hoy el motor turístico de este estado del sur de Alemania. Esta perla arquitectónica, una imitación a pequeña escala del palacio francés de Versalles, fue erigida sobre una antigua mansión de caza. ¡Im-pre-sio-nan-tes! Tres palacios que hicieron inmortal a Luis II. Descubre lo extraordinario del ser humano y el planeta, Viaja a los lugares más lejanos del mundo, Explora los secretos que guarda la historia, Y disfruta de un espectacular número cada mes en tu casa. Entre aquellos magníficos muros pasó la infancia y juventud su hijo, el futuro Luis II. El palacio se encuentra en una de las islas del lago de Chiem, conocido como el mar de Baviera por sus 80 km2 de superficie. Múnich, capital de Baviera, es la primera etapa de este viaje pues, a veinte minutos del centro aloja el Scholss Nymphenburg. Escápate Los palacios de Luis II de Baviera. Tres de ellos están situados cerca de Oberammergau, una adorable ciudad bávara. Era hijo del duque Maximiliano II de Baviera y de María de Prusia. Twitter El rey solía vestirse con ropas orientales para presidir espectáculos nocturnos sentado en un trono de color azul. En la colina situada justo delante del palacio de Hohenschwangau despuntan los torreones del Neuschwanstein, un castillo que las películas de animación de Walt Disney hicieron famoso en la década de 1940. Por encima de las casas del núcleo amurallado emerge la torre del Hohes Schloss o Castillo Alto, edificio de finales del siglo XIII que fue residencia estival de los obispos de Augsburgo. Destacan los jardines, por su fuente central, el pabellón morisco y la gruta. El salón principal refleja el esplendor que rodeaba la vida de los reyes bávaros. Neuschwanstein, Herrenchiemsee, Linderhof. Luis nació en 1845 en una de las regiones que por aquel entonces comprendía uno de los mayores reinos del Imperio Alemán, el reino de Baviera.Aquel niño pertenecía a la familia de los Wittelsbach, hijo de Maximiliano II de Baviera y la princesa María de Prusia, personalidades ilustradas que vivían en un reino próspero en arte y cultura. Tumblr Éste compró la isla en 1873 y mandó construir allí el Neues Schloss (Palacio Nuevo), testimonio de su veneración por Luis XIV, el rey Sol francés. Usamos cookies a fin de mejorar nuestro servicio. “Escápate” tras las huellas de los dorados años veinte en Berlín… Ese era el plan a principios de 2020. Tres de ellos están situados cerca de Oberammergau, una adorable ciudad bávara. Una intensa historia. Escápate Los palacios de Luis II de Baviera. Turismo de Alemania © 2020 Deutsche Welle | Luchino Visconti usó la Sala de Espejos como escenario en su película Ludwig. Hohenschwangau es el castillo donde el "rey loco" pasó su infancia. El refinamiento de los monarcas bávaros es evidente no solo en sus salones, algunos decorados con frescos y lacas chinas, sino también en el museo de carruajes y en la fábrica y el museo de porcelana. 7 Herremchiemsee. El techo está decorado con frescos del pintor más famoso de la época, Johann Baptist Zimmermann. Pueblo tradicional a los pies de los Alpes bávaros. Esta última opción es la más atractiva para familias. El recorrido por el interior empieza en el tercer piso, donde están la antesala con escenas de la saga de Sigurd y el salón del Trono, ornado a la manera de un templo bizantino. La abadía de la isla Fraueninsel (siglo VIII) es uno de los conventos más antiguos de Alemania. Encontrará más información en nuestras Políticas de privacidad. Con Otón … En la cuarta planta se halla la imponente Sängersaal o Sala de los Cantores, con diversas pinturas dedicadas al concurso de trovadores que el príncipe turingio Hermann convocaba en el siglo XII en el castillo de Wartburg. Apúntate a los newsletters que más te interesen y recibe gratis los mejores reportajes, fotografías y noticias cada semana en tu email. Del rey se conserva el dormitorio, su biblioteca y un cuarto de música con el piano que alguna vez tocó Richard Wagner. No menos vistosos resultan el invernadero acristalado y el vestidor, decorado con escenas de la vida de Walther von der Vogelweide, el poeta en alemán más importante de la Edad Media. Con tan solo diecinueve años Luis II de Baviera se tuvo que hacer cargo de la corona, siendo un muchacho obtuvo la responsabilidad de hacerse cargo de el Imperio de Baviera, que curiosamente era algo con lo que no estaba de acuerdo. Es el más pequeño de los tres palacios que el rey Luis II de Baviera mandó construir. Luis II de Baviera, conocido como "El Rey Loco", fue el artífice de algunos de los castillos más especiales de Alemania y de todo el mundo. La capital del estado de Baviera alberga el palacio natal de Luis II de Baviera. google+ Mientras el palacio de Neuschwanstein sigue batiendo récords –en 2013 pasó de 1,4 a 1,5 millones de visitantes–, los otros palacios de Luis II en Baviera siguieron el camino contrario el pasado año. Hay un servicio de tren y autobús hasta el centro de Múnich, a 29 km de distancia. El rey no vivió más de una semana en este palacio de aire versallesco. La parte del palacio habilitada como museo expone, entre otros muchos objetos, los trajes confeccionados para la boda de Luis II, que nunca llegó a celebrarse. El castillo gótico de Hohe y la abadía de St Mang –de claustro románico y salas barrocas– son sus edificios más destacados. 3 Füssen. Fue su predilecto y el único de los suyos que vio terminado. Es una mezcla de estilo Tudor, gótico y medieval.
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